Hoy por hoy me resulta difícil poder hacer salidas fotográficas ya que mi pequeño es un gran imán para mi, en parte gracias a el me estoy dedicando un poco más a los paisajes que a la fauna en general.
Paradójicamente cuando quiero tener un hueco para salir, el campeo me resulta mucho más provechoso, ya que agudizo mucho más los sentidos y ahora no solo veo rastros, esto de los paisajes ayuda a ver la globalidad de lugar, detalles de las piedras que te rodean, las nubes y sus formas así como los cantos de los pájaros o los rastros de mamíferos, eso lo llevo por dentro y los ojos se van solos al mínimo movimiento, el oido siempre preparado.
Por eso me estoy desplazando a la zona de los pirineos y estoy descubriendo auténticos tesoros naturales, en zonas nada transitadas.
Aquí dejo un lago en una zona privilegiada, un rosario sobrevolado por rapaces y frecuentado por todo tipo de mamíferos, por desgracia no esta precisamente cerca de casa, pero estas escapas son para disfrutar.