Cámaras de vigilancia o Scouth

Últimamente mucho compañeros me escriben mails con la intención de informarse sobre la técnica de la barrera infrarroja, gente que quiere empezar y necesita ese pequeño empujoncito, porque por suerte o por desgracia tomar una toma decente de mamíferos nocturnos no se consiguen en 2 semanas. Por ese motivo he decidido explicar un poco mi experiencia de años y años en el campo con estas cámaras.

Todo aquel que lleve un tiempo en el tema las conocerá a la perfección y por eso, para ellos, lo más seguro es que no cuente nada nuevo pero allá van mis impresiones.

Recuerdo cuando empecé en esto mi única forma de intuir que ocurría cuando no estaba presente, era mediante las egagrópilas, excrementos, arañazos en arboles, rasguñones en el suelo y alguna que otra pisada marcada en el lodo o similar.

Documentarnos comprando libros sobre rastros y señales, internet y consultar con buena gente del mundo de la foto es necesario para mantener los sentidos alerta cuando paseamos por el monte y así saber que zonas son las mejores para trabajar, esto es necesario e indispensable, pero señores, las cámaras de vigilancia o Scouth son uno de los mejores inventos en los cuales he invertido parte de mis ahorros.

En internet es sencillo encontrar estas virguerías. Tenemos de todos los precios y prestaciones, todas realizan foto y video, las más sofisticadas te mandan información al móvil cuando se accionan pero yo voy a poner las que para mi son la base y primordial para trabajar.

1. Calidad de imagen: Comprar una cámara justa de calidad de poco sirve, pensemos que de 8 megapixeles para arriba esta bien, si aparece una pequeña rata de campo es interesante verla a ella y no un punto negro.
2. Iluminación: Existen cámaras con flash incandescente, tipo flash de toda la vida, pero estas estresan al sujeto y aquí nos interesa saber como se mueven con naturalidad por el terreno, no alterar su comportamiento, por este motivo estas las desecharemos sin ninguna duda. Las interesantes serán las que utilizan luz roja o infrarroja, las cuales hacen que tengamos visión nocturna sin molestar a los animales.
3.  Video: Cada vez menos, pero aun existen cámaras de este tipo que tan solo hacen foto, pero lo que realmente interesa es que esta grabe video para así conocer las entradas y salidas, lo que mira, como se mueve, si esta nervioso, tranquilo, en pocas palabras hacer un seguimiento total de el sujeto una vez entre en el encuadre.
4. Cuando pasa: Que nos marque la hora exacta de acción así como el día es imprescindible para saber las horas en las cuales debemos trabajar o tenemos más oportunidades de conseguir la fotografía, controlar el gasto de baterías tanto de la cámara como de los flashes y claro esta para organizar la sesión ya que no podemos olvidar que trabajamos con animales salvajes los cuales no se adaptaran a nuestras exigencias o horarios.
5. Seguridad: La cámara que adquiramos es interesante que tenga la opción de comprar las cajas de seguridad diseñadas para estas. Se trata de una caja metálica en la cual colocamos dentro la Scouth y una vez posicionada pasaremos un candado tipo «pitón de las motos» la cual rodeara la cámara al tronco, árbol o poste en el cual apoyemos la cámara.
6. Autonomía: Yo soy de los que opina que las pilas de toda la vida es la mejor opción, pero sea como sea, en este tema no nos pondremos serios, pero es importantísimo que tengan una autonomía duradera, la cual nos deje varios días de grabación, como he explicado antes tratamos con animales salvajes y no esperaran a que nosotros le cambiemos las pilas para pasar y grabarse.

Estos puntos creo que son los necesarios para que no se nos escape ni un solo detalle, todo lo que sale de estos puntos son añadidos interesantes que ayudarán mucho más, pero eso ya depende de lo queramos desembolsar.

Aquí os dejo un ejemplo de los videos que he realizado.